A propósito de la publicación de un libro reciente de Alex Butterworth sobre sobre la lucha de los anarquistas
, John Gray examina la trampa de la política radical. Organizar la revolución es armar un Estado contra otro. El dilema de los revolucionarios es claro, dice Gray, "se mantienen puros, idealistas e impotentes o terminan siendo tan represivos como el régimen que combaten, si no es que más..."
O sencillamente mantienen una actitud individualista de desprecio a toda organización humana, que fue lo que nos sugirió Stirner, en lugar de buscar alguna forma de absurda utopía. Sí, ha anarquistas de derecha.
Publicado por: El Oso Bruno | 19/03/2010 en 09:09 a.m.